LA VIDA SIGUE...¿IGUAL?

En los últimos días una serie de sucesos luctuosos han salpicado nuestras vidas. En primer lugar el atentado de ETA en Mallorca que causo la muerte de dos jóvenes guardias civiles, en segundo lugar el fallecimiento repentino del jugador de fútbol del RCD Español, mientras descansaba en la habitación de un hotel en Italia, donde se encontraba concentrado con su equipo.

En ambos casos han dejado viudas y huérfanos, pero ¿cómo han repercutido estos tristes sucesos en nuestras vidas? A pesar de nuestra tristeza y de que los medios de comunicación no paran de recordarnos ambos acontecimientos, sobre todo el del jugador Jarque por ser más reciente, como se suele decir “la vida sigue”.

Y es que el que estaba disfrutando de sus vacaciones en la playa, la montaña o en su casa ha seguido haciéndolo con total normalidad y los que están trabajando también han continuado levantándose cada mañana y acudiendo a su puesto de trabajo. Es decir, se ha cumplido el dicho la vida sigue...pero ¿igual?.

A pesar de que a diario fallece en nuestro país gente joven de muerte súbita, por accidentes de tráfico, malformaciones congénitas, etc., cuando se trata de casos de personas populares o públicas las muertes adquieren mayor notoriedad. Por este motivo no debemos dejar pasar la oportunidad que estos hechos nos ofrecen y en lugar de encerrarnos en nuestro mundo con total frialdad y decir la sufrida frase:”la vida sigue”, decir si, en efecto, la vida sigue, pero que no sea igual.

Que a partir de ahora sepamos valorar más las pequeñas cosas que la vida nos ofrece día a día y no le prestamos atención, y dejar de quejarnos por cosas banales que no tienen ninguna importancia. Hay que saber apreciar y valorar todo lo que tenemos y ser felices día a día porque no sabemos lo que nos deparará el mañana.

Y dejar lo de “la vida sigue igual” para el bueno de Julio Iglesias.