¡TAXI!

Quien de nosotros no ha utilizado alguna vez esta expresión para llamar a un taxi y quien no se ha sentido alguna vez engañado por el abuso en las tarifas de una carrera, además de la diferencia de tarifas entre distintas horas del día, ciudades y países.

En determinados países no existe ni el consabido "taxímetro" para indicarte el precio de la carrera y es el taxista el que antes de subir te dice lo que te va a costar (en el mejor de los casos, a veces no te enteras hasta que llegas al destino), lo cual dependerá mucho de uno a otro, según la honradez del conductor e incluso se puede llegar a regatear y ponerle tu mismo el precio que creas más justo para ese trayecto.

Según un estudio realizado sobre las tarifas de los taxis de 41 ciudades españolas revela diferencias de hasta el 169,4% en los precios de viajes de similares características. Tarragona, San Sebastián, Murcia y Lugo tienen las tarifas más elevadas, mientras que las más bajas son las de Santa Cruz de Tenerife, Ceuta, Logroño y Cádiz.

Por ejemplo, un trayecto de un kilómetro realizado en horario diurno cuesta en Ourense 1,83 euros, bajada de bandera incluida, mientras que en Tarragona supone 4,93 euros, un 169,4% más. La carrera mínima más cara en horario diurno es San Sebastián, con un coste de 4,65 euros. En horario nocturno, la carrera mínima más elevada es la de Valencia, 6,00 euros.

Es decir, sólo por el hecho de decir la palabra mágica ¡taxi! una noche aquí en mi ciudad, Valencia, ya cuesta 6 euros y luego lo que suba el kilometraje del trayecto. Por lo visto, sale más barato llevarte tu propio coche y meterlo en un parking si es que hay problemas de aparcamiento.

Y es que la subida media de la tarifa en el último año ha sido del 5.8%, mucho más que el IPC interanual, y eso que ha bajado el precio de los carburantes. Creo que debería estar más regulado el precio de los taxis,pues con estos precios no se como pretenden las autoridades que se utilicen más los transportes públicos.