Para los que no lo recuerden, el profesor Neira era un ciudadano anónimo hasta que vio una persona, Antonio Puerta, supuestamente agrediendo a una mujer, Violeta Santander, y le recrimino su actitud. Este le propino un puñetazo que le hizo caer al suelo golpeándose la cabeza. Tras pasar unos días asintomáticos y acudir en distintas ocasiones a urgencias, presento un coma que le duro varios meses.Mientras tanto, la prensa y la opinión pública lo ensalzaron hasta casi héroe nacional y solo falto que el Papa lo beatificara. Es evidente que no estoy a favor de la violencia de género, ni de ningún otro tipo de violencia, pero también lo es que después de haberlo escuchado hablar, me imagino en que términos se dirigió al supuesto agresor e incluso pienso que lo provocaría con insultos, en vez de apaciguar los ánimos o llamar a las autoridades.
Por otra parte, sin querer defender al agresor, es obvio que sólo le atesto un puñetazo y fue verdadera mala suerte que cayera golpeándose la cabeza con tan mala suerte de sufrir a los pocos días un coma. No es que lo linchara ni nada por el estilo.
A Esperanza Aguirre le falto tiempo para nombrarlo presidente del Consejo Asesor del Observatorio contra la Violencia de Género, sin más méritos que haber permanecido en coma por meterse, en mi opinión, donde no debía.
Desde entonces ha aparecido en numerosas ocasiones en los medios en el mismo tono que la primera vez y creyéndose en posesión de la verdad absoluta.
Representantes del Partido Socialista, con buen criterio, han solicitado su dimisión como presidente del Consejo Asesor del Observatorio contra la Violencia de Género, pues no parece correcto que una persona con estos principios anticonstitucionales ocupe un cargo público. A esto el señor Neira ,en otra salida de tono, ha respondido acusando al PSOE de cometer a lo largo de su historia "barbaridades y asesinatos", y dijo a los representantes socialistas madrileños que tenían que haber solicitado en su momento la dimisión del ex presidente del Gobierno, Felipe González, o la de "grandes criminales" como Rafael Vera y José Barrionuevo, relacionados con los GAL.
Juzguen ustedes mismos…











