Su propietaria lo inscribió en el censo de 2010, especificando que se trataba de un felino, hecho que ha pasado desapercibido en la burocrática administración estadounidense.
Pese a las reclamaciones enviadas por la dueña aclarando que su mascota no está cualificada para servir en un jurado, la comisión del jurado obliga a Sal a presentarse en un juicio que se celebrará el 23 de marzo.
Lo bien cierto es que para formar parte de un jurado popular no se si estará preparado el gatito,pero quizás pudiera gobernar algún país con más honestidad que los golfos que andan por ahí robando y dejando países en ruina, y no lo digo por nadie en concreto,pero a buen entendedor...
6 comentarios:
Pues sí, si quien yo me sé puede ¿gobernar?, ¿por qué un gato no puede testifiar?
¡Hola Juancar! cuanto tiempo, feliz año.
Estos yankis son la bomba pero como muy bien dices, seguramente gobernaría bastante mejor que muchos humanos, jaja.
Me alegra mucho volver a leerte, ando muy liada ultimamente, pero te leo aunque no pueda contestarte, besitos.
Perdón, la palabra es testificar.
Desde luego, hay animales que tienen más sentido común que algunas personas. Eso es verdad, así que...
:)
Besos, Juancar!!
Todos opinamos igual...Si algunos pueden mandar...otros podrán pertenecer a un jurado!!!!¿¿¿¿Porqué quién dice que el felino no tiene más sentido que algún humano????? Un besazo Juancar
Que bueno! Un gato de jurado!! Y lo próximo... que será??
Besines
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